Agua, urbanismo y desarrollo sostenible

Las competencias de los municipios o comunidades incluyen la gestión del agua y del saneamiento, la gestión de las aguas pluviales, la GEMAPI (gestión de los medios acuáticos y protección contra las inundaciones), las carreteras, el desarrollo urbano, etc. 

El agua ha sido a menudo objeto de infraestructuras que la han ocultado a la vista de los habitantes, a través de redes enterradas y olvidadas. 

La percepción de las sequías e inundaciones, por ejemplo, se ha convertido en una falsa novedad, debido a los extremos provocados por el cambio climático

Las redes envejecidas están mostrando sus debilidades. La desnaturalización de los cursos de agua y la canalización de la escorrentía provocan inundaciones incontroladas, reforzadas por la urbanización impermeabilizante que aumenta la potencia de la escorrentía. 

Se está produciendo un gran cambio en la ordenación urbana, que está integrando el agua de forma más visible. 

Repermeabiliza los suelos urbanos para favorecer la constitución de los recursos y limitar el riesgo de inundaciones. Integra la problemática del uso de aguas no convencionales

Ahora utiliza los servicios ecosistémicos ofrecidos mediante una mejor gestión del agua en los hábitats densos, mejorando el entorno de vida.